ANÍS Espino

El producto data sus primeras ventas hacia el año 1890 aprox, cuando el industrial Santiago Zapata  propietario de una fábrica de alcoholes en Almendralejo comenzó a destilar su propio aguardiente de anís mediante viejos alambiques calentándolos con leña de encina y su propia receta. En aquella época, no se comercializaba en botellas de cristal por cuanto todo se vendía al granel.
Fue en  1940, después de la guerra civil cuando su nieto Francisco Espino Delgado inició  la comercialización en botellas llegando a tener en aquella época, una importante presencia comercial, convirtiéndose en un producto destilado extensamente distribuido en todo el país , dada la singularidad de este excelente  anís.
En el año 2010 Gardel adquiere la propiedad de la marca y con ella el compromiso con la familia Espino y Almendralejo, para continuar con el legado de un producto baluarte y embajador durante tantos años de nuestra ciudad.  Desde el primer momento entendimos que la manera más respetuosa de honrar la visión de D. Francisco Espino, era continuar la producción siguiendo su centenaria receta, con los mismos ingredientes y procesos empleados para  conseguir ese sabor tan característico.
En la actualidad las producciones se han reducido debido a los hábitos de consumo y a las exigencias actuales del mercado, gracias a lo cual, hemos  mantenido  la producción  en el mismo proceso de artesanía de siempre, donde elaboramos, prácticamente con la misma mecanización de la época. Asegurándonos también , que nuestros lotes cumplen además  con los controles de calidad  que hoy en día se necesitan.

ANÍS DULCE

Destilado de gran expresión. Representa la tipicidad del destilado. Impresiona extraordinariamente todos los sentidos. Complejo, lleno de registros, tanto olfativos como gustativos, producidos por el conjunto de los valores sensoriales de las materias primas en su destilación. Es elegante y fuera de lo común, es decir, alejado de los estándares comerciales.

CATA
Color cristalino. Aroma de notas anisadas, hierbas de monte, potente, expresivo.
Boca dulcedumbre.

ANÍS SECO

Fabricados desde nuestra fundación como siempre, “gota a gota”, procesos que duran días enteros.
Graduación alcohólica 54% en volumen.

CATA
Incoloro y transparente.
Anisado, muy fino y espirituoso.
Astringente y volátil, permaneciendo largo rato en el paladar.

ANÍS CREMA

CATA
Destaca su gran intensidad aromática.
En boca: Su paladar revela notas de anís cremosa, con un final aterciopelado y persistente.

Servir muy frío. Los puedes degustar solo como chupito o en una copa o vaso ancho con hielo.
No mezclar con bebidas cítricas.